miércoles, febrero 27, 2008


Cada vez que te toco siento espinas. Me das abejas y te devuelvo miel.

El instinto del sueño me lleva a tu cuerpo. Despierta o dormida, estés o no, cada noche te abrazo antes de dormir.
Buceabas en el fondo de mis ojos, y ahora apenas te asomás a la orilla por miedo a ahogarte...